Se que morís por descubrir qué lugar ocupas en mi cabeza,
y que no te deja dormir en paz saber si estás en mi lista negra.
En mi lista hay traidores, hay deudores,
acreedores y rencores que una vez fueron amores.
Hay fingidos salvadores vestidos de predicadores
hay santos y pecadores, peores que los roedores.
Hay difamadores y desagradecidos,
a los que hice favores y ahora se hacen los desentendidos.
Puse legisladores de varios partidos,y es sabido que algunos,
se lucen por tener menos luces que apellidos.
Hay vencedores vencidos y empedernidos dictadores.
En mi lista está esa, la que no volvió diciendo
“voy al baño y ya vuelvo”,
y está ese que se fue con lo prestado diciendo
“ya te lo devuelvo”.
A nadie absuelvo, ni soy complaciente,
en mi lista hay incluso algún pariente.
Paso revista y veo al patrón clasista
que me echó porque le surgió en su terapia conductista,
y por oportunista están él y su analista,
en mi lista hay gente que se pasó de lista.
Además están esos que no estuvieron
cuando yo esperaba que estuvieran ahí,
y los que de mi se rieron cuando caí, esos también están aquí.
mi lista es amarga y es mas larga que el numero pi.
Mi lista es mi tratamiento en épocas de abatimiento
es mi escondite y mi aliento frente al padecimiento
Es mi primer y único mandamiento, es un documento
y en ella están los nombres causantes de mi sufrimiento
no miento, mi lista es mi instrumento
y no sabe de miramientos así que lo siento.