Necesito, tenés y quiero.

No puedo escaparme del mendigo papel del necesitar que me necesiten.

Necesito que te acuerdes de mi,

Necesito que pienses cuando estoy y me busques para hablar.

Necesito ser la pregunta de tus “que hubiera pasado si…”

Necesito ser el motivo de tu mensaje en la mañana,

y el de la noche antes de cerrar tus ojos.

Necesito que me descubras, que me conozcas, que me desnudes el alma.

Necesito gustarte, moverte la cabeza de allá para acá.

Necesito entrar en tu cerebro para rebotar en tus neuronas.

Necesito demostrarte todo lo bien, que nos podemos llevar.

No quiero compromisos, mucho menos una obligación,

Quiero pasar el tiempo de techo en techo y si es con tu compañía, mejor.

No lamas la cicatriz que ya no existe, y nunca se infectó

Y prometo no pedirte explicaciones cuando ya no tengas corazón.  

Mil y una vez voy a preguntarte que pasó ayer,

y mas de un mensaje mio borracha vas a leer.

No quiero una foto al lado tuyo, ni me importa esa mentira de los meses.

Yo no pierdo la vida contando el tiempo, pero no dejemos que esto se descoloree.

Quiero poner los redondos al mango y hacerte bailar, mi amor,

O leerte a Cortázar o Neruda, según arremeta la situación.

Dejemos que todo fluya y liberá de una vez toda esa energía,

Que este candombe, ya se encendió.

Con todo aquello que necesite, despreocupate, corre por cuenta propia,

Pero antes de desconectarte te voy a pedir que respondas mi pregunta…

¿Tanto cuesta desbaratarme?
Por mi.